CAMPEÓN MUNDIAL SUPER PLUMA AMB 1971
El aguerrido boxeador Alfredo Marcano nació en Cumaná el 17 de Enero de
1947. Incursionó en el boxeo en 1961, en representación de su natal Estado
Sucre. Su primer combate profesional sería ante Pedro Chirinos el 1° de Marzo
de 1966.
Marcano obtuvo una serie de triunfos destacados que lo catalogaron como uno de
los boxeadores más prominentes a nivel mundial. Sobre todo cuando el 29 de
Julio de 1971, en la ciudad de Aomori, Japón, obtuvo el título de Campeón
Mundial Super Pluma de la AMB, ante el boxeador local Hiroshi Kobayashi,
consagrándose como el segundo pugilista venezolano en alcanzar un título
universal ese año, de la mano del connotado entrenador Ely Montes.
Defendió su corona sin problemas en Caracas ante el también nipón Kenji
Iwata. Pero su reinado tuvo una corta duración, al ser derrotado en Hawái el 25
de Abril de 1972 por Ben Villaflor, de 19 años de edad.
En su intento por recuperar el título, Marcano obtuvo una serie de triunfos y la oportunidad de enfrentar al entonces campeón mundial Bobby Chacón, de nacionalidad norteamericana. El declive de sus condiciones físicas le pasó una factura ineludible, marcando con ello el ocaso de su carrera profesional.
Ganó 43 peleas, 29 de ellas por la vía del knock out, igualó 5 y perdió
12. En las postrimerías de su carrera contó con la asistencia del Ministerio
del Deporte, de la Fundación para la Atención de los Atletas y Ex Atletas en
Situación de Retiro, y de la Fundación Glorias Deportivas de Venezuela durante
sus últimos años.
Desde sus inicios como boxeador aficionado, hasta su retiro del
pugilismo profesional, hizo valer la increíble potencia de sus nudillos, que
combinaba un demoledor upper con un gancho de derecha, causando estragos en
cada uno de sus oponentes.
Libró su último combate contra un despiadado cáncer del que
lastimosamente no se pudo sobreponer, sucumbiendo como una víctima más de esta
terrible enfermedad el 5 de abril del 2009, en la ciudad que lo vio nacer.
Con su desaparición física
dejó una profunda huella en el deporte nacional. Fue un ícono fundamental de
una época que marcó un hito memorable para el boxeo profesional y el deporte
venezolano en general durante las décadas de 1960 – 1970.
Por: Carlos Espinoza.
